Ya estamos en pleno rodaje en el norte del país. En el pueblo de Curtina, departamento de Tacuarembó, Uruguay.
Tacuarembó és una ciudad de gente tranquila, de tradiciones gauchas, de bueno comércio. Son ciudadanos conectados a la tierra. Logo, a tiempos más antiguos.
Nuestro trabajo aqui es recriar una época vívida para toda una nación, de la manera más verdadera possível, pero sobretodo – hacer Cine. La arte de cine es cuentar histórias. Pasar mensajes a frente y para eso certas licencias son necesarias. Se juntan 3 o 4 personajes históricos en uno. Cabianse nombres, otros no pueden estar. Tuve un tiempo que solamente teníamos acceso a ellas por memória transmitidas oralmente dentro de su comunidad, con su familia, viajes. En charlas ricas y preciosas de troca de información. Eses cuentistas estan por aún hoy, por alli. Y alguns de els son cineastas.
En este proyecto se percebe la concepción artística baseada en rigorosa pesquisa histórica. Fueron contactados historiadores de gran porte que nos ayudarón a establecer las licencias necesarias. La escrita narrativa de Pablo Vierci encontró Carlos Maggi, gran intelectual uruguayo y la Prof. Marta Canessa, que prestó mucho auxilio, e incluso lo hizo a pedido de Sancho Gracia, el productor de la Série Libertadores. La historiadora Ana Ribeiro, pesquisadora profunda en todo sobre Artigas y su entorno también está presente para garantizar verosimilitud históricas. La Prof. Dra. Ana Frega, delegada por la Universidad de la República ante la Comisión de Patrimonio Cultural de la Nación, transmitió à Daniel Fernandez Cappi y Mariana Pereira valiosos conocimientos para el diseño del proyecto de arte.
Gracias a eses aportes de gran fuerza intelectual llegamos en Tacuarembó, hasta la Patria Gaucha. Sin la Patria Gaucha no hubiera como rodar la película La Redota do modo como ella fue concebida.
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